La violencia doméstica es un patrón de tácticas represivas que pueden incluir abuso físico, psicológico, sexual, económico y emocional entre otros, que son cometidos por una persona en contra de su pareja, con el objetivo de establecer y mantener el poder y control. Este tipo de tácticas ocurren en todas las relaciones; incluidas las parejas casadas, las personas que viven juntas, personas con niños en común, parejas del mismo sexo , personas que estaban anteriormente en una relación con la persona que aún abusa de ellos, adultos y adolescentes en una relación de pareja.
La información que usted va a leer en esta sección de ayuda, le mostrará una perspectiva realista sobre la manipulación, la coerción y el control de tácticas de los abusadores que le hará hacer preguntas más específicas, tales como: “¿Qué hizo él para obligarla a quedarse?”, “¿Cómo hizo para obligarla a regresar?” y “¿Qué hizo él?”. La violencia doméstica es una decisión que los abusadores toman para obtener y mantener el poder y control. Nunca es culpa de la víctima. Las víctimas hacen lo que sea necesario para sobrevivir y así mantenerse ellas y a sus hijos seguros.
También es importante reconocer que la violencia doméstica puede ocurrir en diferentes tipos de relaciones. Mientras que la mayoría de los sobrevivientes son mujeres, los hombres también pueden ser víctimas. En áreas de la simplicidad, nos referimos a la víctima / sobreviviente como “ella” y el perpetrador / agresor como “él”.